Julio 9, 2020
Una recuperación sólida requiere un sector sano del seguro de crédito comercial
En un nuevo estudio, el consultor externo Robert Litan y el economista Yong Xu, ambos expertos de la industria financiera, encuentran que debido al fuerte aumento de la incertidumbre económica debido a la recesión inducida por el COVID-19, las aseguradoras de crédito comercial con sede en Estados Unidos -que cubren el riesgo de que los proveedores y otras empresas no reciban el pago de sus compradores- ya han recortado su cobertura en casi un 14% desde finales de 2019.
Los autores prevén que las aseguradoras podrían hacer recortes adicionales si las tasas de infección aumentan en todo el país y si la tan esperada "segunda oleada" del virus llega este otoño.
El seguro de crédito comercial (TCI) es de vital importancia para el buen funcionamiento de las cadenas de suministro, ya que sin él, muchos proveedores, especialmente las empresas pequeñas y medianas, serían reacios a ampliar sus ventas a fabricantes o minoristas.
Con menos cobertura de las ITC, las empresas aseguradas tendrán menos capacidad para satisfacer la creciente demanda de sus bienes y servicios por parte de sus compradores -fabricantes y minoristas- a medida que repunte la demanda de los consumidores. Los autores estiman que, en ausencia de una respuesta gubernamental, los recortes en la cobertura de las ITC inhibirán una producción adicional de 46.000 millones de dólares y la creación de unos 155.000 puestos de trabajo entre las empresas proveedoras. Se trata de estimaciones a la baja del impacto en toda la economía por múltiples razones, pero sobre todo porque no incluyen la inhibición de la producción y la creación de empleo en las industrias transformadoras y minoristas.
Sin embargo, los efectos adversos estimados por los autores pueden evitarse si el gobierno de EE.UU. compartiera de alguna manera con la industria de TCI, durante un periodo temporal, el riesgo de impago de los clientes de TCI, el 60 por ciento de los cuales tienen ingresos de 20 millones de dólares o menos.
Los autores analizan las características y ventajas de un programa de reaseguro gubernamental temporal propuesto por las tres mayores aseguradoras privadas de TCI de EE.UU. para llevar esto a cabo, financiado en parte por primas de reaseguro determinadas por el mercado y pagadas al gobierno federal. Dicho programa se inspira en las mejores prácticas de enfoques similares ya adoptados o en estudio en otros países del G-7.